JAVIER VALENZUELA: “ES IMPOSIBLE TRABAJAR EN UN SINDICATO, SI UNO NO ESTÁ IMBUIDO DE CONVICCIONES EN DEFENDER A LOS TRABAJADORES”
El Sindicato de Empleados de comercio de la zona Oeste, cuenta con un Departamento Jurídico a través del cual, entre otras actividades, contribuye a resolver los conflictos individuales y colectivos. Esta área trabaja en conjunto con la Secretaría Gremial y por eso, funcionan en el mismo edificio ubicado en San Martín en Morón. Cuando uno ingresa por la entrada principal a gremiales, hacia la izquierda se encuentra una escalera que te lleva al primer piso donde están las amplias y luminosas oficinas de Jurídico. En las puertas de vidrio de la entrada, están inscriptos los nombres de los siete abogados que asisten a todas las delegaciones que componen el SEOCA. El jefe del departamento, el Dr. Javier Valenzuela, nos recibe en su despacho, luego de atender al secretario de gremiales, y a un delegado.
SEOCA PRENSA: Gracias por recibirnos, hace tiempo que queríamos conocer el funcionamiento de este departamento, que tiene una tarea importante en la mediación de los conflictos
JAVIER VALENZUELA: Esta es un área que tiene directa dependencia con la Secretaria General. El Departamento de Jurídico, asiste tanto en los conflictos individuales de trabajo como en los colectivos. Los primeros son aquellos que afectan el interés de un trabajador o de una pluralidad de trabajadores. Los segundos son aquellos atravesados por una problemática que afecta a una categoría profesional de trabajadores; por ejemplo, cuando se está discutiendo condiciones de trabajo, salarios, despidos masivos, medidas de fuerza, etc. O cuando se halla comprometido el sujeto colectivo, que, en este caso, sería la representación gremial en la empresa o la propia organización sindical. Cuando un conflicto individual no tiene resolución en el plano gremial, entonces transita por la otra instancia, que es la jurídica, es decir, la representación de los intereses del trabajador en juicio.
La otra tarea de vital importancia a cargo de nuestra área es el control y asistencia de todas las Secretarias, especialmente la Secretaria General, Actas y Administración, y la de Organización, para que todas las actuaciones se ajusten a derecho.
S.P: ¿Quiénes lo integran y cómo desarrollan sus tareas?
J.V: El plantel está integrado por seis abogados los Dres: Alicia Coraggio, Viviana Akerman, Martin Loaiza, Lautaro Valenzuela, Leticia Frappa y Diego Ibave. Además, de quien te habla, a cargo del área. Se asiste en las diferentes delegaciones, pero centralizándolo en Morón. Porque como te expliqué anteriormente, cuando un conflicto no tiene resolución en vía administrativa, o sea en el ámbito del Ministerio de Trabajo, sea ya por despido, sanción, enfermedad, etc, se deriva a los abogados que son los que asisten a los trabajadores en la justicia.
Además, capacitamos a los trabajadores sobre temas puntuales que los afectan, pero también a los asesores gremiales en particular que son los que están al frente en cada delegación para ayudar a los trabajadores en cada conflicto. Esa es una tarea que tiene que estar bien hecha, porque define el futuro del trabajador en el conflicto, ya que, si la se lleva a cabo mal al inicio, por ejemplo, un mal intercambio telegráfico, que es la primera intervención del empleado cuando va a reclamar algo, un rechazo ante la imputación del empleador, y eso está mal encarado, no hay formas después de reconstruirlo, se trabaja sobre lo que está. Por lo cual es una tarea de vital importancia, capacitar a los asesores gremiales.
S.P: Recién definiste el conflicto colectivo, como aquel que conflicto atraviesa a toda la categoría profesional ¿podes darnos un ejemplo?
J.V: Una discusión sobre salarios, condiciones de trabajo, seguridad e higiene, no perjudica a un solo trabajador, sino a todos; inclusive cuando existe un despido discriminatorio, no atraviesa solo al trabajador afectado, sino a sus pares.
S.P: ¿Cómo sería en este último caso ?
J.V: Cuando se discrimina al trabajador por razones de su militancia sindical, sus ideas, sus convicciones religiosas, personalidad, etc, estamos en presencia de un acto repudiable, que si bien alcanza a ese trabajador en particular, sus efectos se proyectan al resto, porque todos están amenazados por la misma lógica discriminatoria. Por eso, lo que se presenta como un simple conflicto individual de intereses, se transforma muchas veces en uno colectivo, y ahí es donde el Sindicato impone su presencia para intentar dirimir la cuestión a favor del derecho a la no discriminación. Esa es una de nuestra hipótesis de intervención. La otra también, es cuando después de cada conflicto, se sucede un acuerdo, que son los famosos acuerdos colectivos, generalmente llamados “acuerdo colectivo de empresa”, porque existió previamente un reclamo por una determinada situación, como por ejemplo, una mejora salarial. Entonces, se inicia con un conflicto sobre un reclamo de los trabajadores -que la empresa rechaza-, y si se desencadena bien, termina en un acuerdo donde se pautan las condiciones de implementación
S.P: Intervinieron en muchos conflictos, pero ¿Cuál fue el que más recordás por lo que significó la lucha?
J.V: Es difícil tallar la identidad del conflicto. Pero uno de los últimos fue el mayorista Yaguar de Moreno, que se manifestó por discriminación sindical a los compañeros delegados, y la empresa los despidió invocando una razón que nada tenía que ver con la realidad; fue un conflicto en una empresa importante, que duro unos cuatro días, y se empaño con denuncias penales a los trabajadores por parte del empleador, y al sindicato. Finalmente se llegó a un acuerdo satisfactorio. En este tipo de conflictos es donde se ve con claridad la solidaridad de los compañeros, donde se hace ver la logística del sindicato, y uno valora la importancia de estos, porque lo que no pueden los trabajadores por su propio peso, lo puede el sindicato. Hemos tenido un montón de conflictos para resolver, porque SEOCA Zona Oeste, se ha caracterizado por no esconder los conflictos bajo la alfombra, sino asumirlo y tratar de resolverlo.
S.P: ¿Como es el trabajo que realizan en conjunto con Secretaría Gremial?
J.V: Una de las tareas que fue auspiciada por la Secretaría General, fue el trabajo en conjunto de la secretaría de Gremiales junto a Jurídico, porque es importante que las dos áreas se manejen en la misma dirección, con la misma sintonía porque básicamente es difícil separar los espacios.
S.P: Vemos que están una buena parte del tiempo consultándolos.
J.V: Permanentemente, desde cómo encarar un conflicto a través del marco jurídico para que vaya enderezándose, sabiendo que antes del conflicto hay una intimación telegráfica del sindicato para que la empresa reconsidere alguna situación. Por ello es no concebimos compartimentos estancos, diferenciados, porque son áreas que se complementan y se necesitan recíprocamente. Las empresas deben saber que los reclamos que hacen los trabajadores se ajustan siempre a derecho. Y también deben saber esas empresas, que nuestro reclamo jurídico, tiene el peso de la movilización de los trabajadores, que lo sustente. Intentamos, y debemos ser dos partes de un todo.
S.P: ¿Cuál es el sentimiento que te surge al tener la posibilidad de defender a un trabajador en la instancia jurídica? ¿Qué sentís?
J.V: En realidad me tendría que remontar a mi educación. -hace una pausa y prosigue- Me crié en una familia de militantes sindicales, mi padre fue uno de los fundadores de SUTEBA de la provincia de Buenos Aires. Fue secretario general de SUTEBA de Moreno, hasta unos meses antes de su muerte. Y en esa crianza fui inculcado por unos valores, en desmedro de otros. Por lo cual, no me imagino estar en otro lugar que no sea trabajar en un Sindicato. Es imposible trabajar en un sindicato, si uno no está imbuido de las convicciones que supone luchar para la defensa de los trabajadores. Y como me gusta decir a mí, aun en desmedro de mi propia profesión si se quiere, un conflicto que se judicializa porque no pudo resolverse en la pelea gremial, es un conflicto perdido. Aun cuando ese reclamo se gane posteriormente en un juicio. El Sindicato, al igual que las leyes laborales, están para nivelar las desigualdades existentes en la relación entre el patrón y el trabajador.